La ashwagandha, también conocida como withania, es una planta de origen indio que ayuda a mejorar el bienestar físico y mental de personas afectadas por problemas emocionales, psicológicos, metabólicos y fisiológicos, de manera natural.
Dados sus numerosos beneficios para la salud los expertos la recomiendan como remedio natural para mejorar el bienestar y la salud.
Beneficios de la Ashwagandha
- Reducir el nivel de estrés gracias a su acción adaptógena, que ayuda a afrontar situaciones adversas o cambiantes, y permite sobrellevarlas en las mejores condiciones.
- Eliminar el insomnio y favorecer el sueño. Esto se consigue gracias a la acción de activos como el withanólidos y el trietileneglycol que favorecen la fase REM, fase en la que se desarrolla el sueño más profundo y reparador.
- Tratar la ansiedad y la depresión. Por su naturaleza de planta revitalizante se emplea para tratar estados depresivos y ansiosos leves y puntuales.
- Ayudar en el tratamiento del déficit de atención por hiperactividad nerviosa.
- Favorecer la relajación mental y despejar la mente.
- Combatir la astenia y la pérdida de vitalidad gracias a su poder revitalizante, especialmente en personas de edad avanzada.
- Combatir la fatiga nerviosa, la debilidad y los estados anemia ferropenia, ya que eleva de manera significativa los niveles de hemoglobina y eritrocitos (hematíes) en personas anémicas y convalecientes de una enfermedad.
- Atenuar los efectos secundarios de los antipsicóticos, empleados en el tratamiento de las esquizofrenias, al mitigar el posible aumento de los niveles de lípidos y azúcares que estos pudieran generar.
- Favorecer la producción de hormonas tiroideas pues tiene efecto estimulante de la glándula tiroides, por lo que ayuda en el tratamiento del hipotiroidismo.
- Por su acción antiinflamatoria y analgésica es eficaz para aliviar el dolor reumático y reducir la inflamación de la artritis.
- Ayudar a bajar la tensión y reducir el colesterol malo (LDL).
- Fortalecer el sistema inmunológico por su efecto inmunomodulador, que provoca el aumento de leucocitos o glóbulos blancos y fortalece así al organismo frente a una infección o agresión patógena.
- Prevenir la pérdida ósea aumentando la resistencia ósea a las fracturas, algo muy interesante para las personas de edad avanzada y fragilidad ósea.
- Mejorar el alivido y favorecer la fertilidad