Para cuidar tu salud hay numerosas plantas y semillas que pueden ayudarte, pero hoy vamos a hablar, concretamente, del aceite de calabaza. Éste se obtiene prensando las semillas crudas de la calabaza en frío, para conserve todas sus propiedades.
Este aceite tiene unas cualidades nutricionales excelentes ya que ácido grasos Omega 9 y Omega 3, vitaminas A, B1, B2, B3 y B6, vitamina K y vitamina E. Además, contiene flavonoides, triptófano (aminoácido esencial), cucurbitacin, minerales: selenio, hierro, zinc, magnesio, potasio y cobre, y tiene un alto contenido en fibra.
Como vemos, tienen una gran riqueza nutricional lo que lo convierte en una opción ideal para cuidar nuestra salud.
Beneficios del aceite de calabaza
Gracias a su composición, el aceite de semillas de calabaza, aporta números beneficios para la salud:
- Es antiinflamatorio
- Aumenta la fertilidad masculina y ayuda a prevenir el cáncer de próstata.
- Reduce los síntomas premenstruales y menopáusicos.
- Elimina la retención de líquidos.
- Cuida nuestro sistema cardiovascular pues es antiarrítmico.
- Estimula el buen funcionamiento de los riñones.
- Tiene un poder antiparasitario, previniendo por ejemplo de los parásitos del intestino como las solitarias.
- Combate el estreñimiento.
- Es descongestionante y expectorante.
- Es un buen lubricante para las articulaciones, sirviendo como remedio para la artritis.
- Previene el envejecimiento de la piel, gracias a los flavonoides que lo forman, lo que lo convierte en un aceite antitumoral.
- Ayuda a prevenir las caries, las uñas débiles y la caída del cabello debido a la cantidad de minerales que contiene.
- Ayuda a recuperar los niveles de calcio, dando fortaleza a la estructura ósea.
- Regula los ritmos del sueño por lo que combate el insomnio.
- Regula los niveles de insulina en sangre ayudando a prevenir los daños de la diabetes.